Disfruta de unos días de aventura
Si eres de esas personas que no consideras un plan al aire libre una posible opción, seguro que es porque los sitios que has visitado no han sido los correctos.
Muchas personas ven el turismo en la naturaleza como una perdida de tiempo recorriendo largos caminos con empinadas cuestas, altas temperaturas y como sí esto no fuese suficiente, compartiendo el espacio con diversos y molestos bichos. Si te quedas con esto, llegarás a casa cabreado por haber desaprovechado esos esperados días de descanso sin hacer un plan divertido y con el regalo de numerosas picadoras por todo el cuerpo.
Pero para eso estoy yo aquí, te aseguro que cuando termines de leer este post vas a ser tu el que vas a estar deseando disfrutar de unos días de turismo rural.
Si la naturaleza la ves aburrida es porque aún no has disfrutado de la infinidad de actividades que te ofrece los Arribes del Duero y sus alrededores, desde senderismo, observación de aves, catas de vino o aceite, actividades deportivas terrestres o acuáticas, cultura, turismo…
Infinidad de planes que voy a intentar contarte en sólo unos párrafos y que te ayudarán a sacarle el máximo partido a tu escapada a los Arribes del Duero (Zamora).
El gran encanto de los Arribes se lo aportan los pequeños pueblos que lo componen al tener en su interior diferentes zonas que visitar, gastronomía que degustar, vinos que catar… pero lo que los hacen aún más especial, son las personas que los habitan, quienes están deseando contar a los excursionistas la multitud de historias sobre el origen de su pueblo o sus batallitas de cuando eran niños. Hay que reconocer que ellas son las que le dan el verdadero toque mágico al pueblo.
Una parada obligatoria es Fermoselle, considerada la cuna del vino y uno de los municipios más bonitos y pintorescos de la geografía española. Tanto esconde esta villa que esta denominada por la Comisión de Patrimonio como Conjunto Artístico, Histórico, Cultural y Arquitectónico.
Si visitas este pueblo no te olvides de recorrer algunas de estas rutas antes de que otros te den envidia cuando te cuenten su paso por ellas, no dirás que no te he avisado…
Por supuesto, sin alejarte del propio pueblo puedes recorrer sus estrechas y empinadas calles de las que se levantan emblemáticos edificios antiguos, los cuales, esconden entre sus muros innumerables historias de cientos de años atrás. Oye! Estate muy atento al nombre de las calles, estoy seguro que más de uno te sacará una sonrisilla, ya que me apuesto que nunca has escuchado una calle que se llame Las Tenerías o mejor aún, El Guapo.
Y si lo que te gustan son las visitas a edificios religiosos, te sugiero que pases por la Ermita de la Soledad de estilo románico del siglo XIII rica en detalles arquitectónicos y La Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, fácil de reconocer por sus arcos apuntados y decoración tosca.
Las visitas a los monumentos no suelen gustar a todo el público, lo qué seguro qué si será un acierto unánime de toda la familia, son las rutas por los miradores. Asique para facilitaros un poco la excursión, os dejo una lista de los miradores que ofrecen las mejores vistas del paisaje.
Sube unas estrechas escaleras y llegarás al Mirador del Torrejón desde el que podrás divisar; Fermoselle, los Arribes del Duero y hasta Portugal. Si lo que buscas es ver una panorámica de los campos de cultivo, el Mirador de las Peñas es ideal. Y ya que visitas el casco histórico de Fermoselle, no te olvides de asomarte en el Mirador de los Barrancos para disfrutar de los distintos paisajes de los Arribes, de la plaza de toros y el barrio de Santa Colomba.
Pero si lo que eres es un amante de los vinos, esto va para ti. Como te he señalado anteriormente, Fermoselle desde su origen, es conocida como la Tierra de vino, y es por ello, que alberga numerosas bodegas. Debido a la curiosidad de los enófilos, varios empresarios han decidido abrir la puerta de sus bodegas al comprobar que esto, aumenta el número de sus ventas. Para conocer lo que esconde el extenso mundo del vino, visita la bodega subterránea de Peños Martín Marcos, El pulijón o Angelita. Puedes contratar visitas guiadas por todas estas bodegas por un bajo precio y además, la mejor parte, al finalizar podrás hacer una cata y sentirte como todo un experto.
Después de haber hecho un recorrido por el pueblo, es hora, de descubrir lo que esconde su entono. En primer lugar, destaca la comarca de Sayago, su pequeño tamaño no es sinónimo de aburrido. En esta comarca, hay paradas que sin duda son obligatorias. Si eres como yo y no consideras un plan mejor que el de dar un paseo en donde el único ruido es el piar de los pajarillos, sin lugar a dudas, debes pasear La Rivera de los Molinos de Moral de Sayago. Si a esto le sumas un picnic ya es el plan ideal (ya que no me podrás negar que la comida en el campo saber mejor…).
Igual que Fermoselle, Sayago también cuenta con puntos estratégicos desde los cuales podrás divisar paisajes de película. Uno de estos, es la Peña redonda, una enorme piedras desde la que podrás contemplar los Arribes.
Ahora vamos a centrarnos un poquito en municipios portugueses cercanos a Fermoselle. En primer lugar se coloca Bemposta, se rumorea que los Romanos lo usaron como fortaleza análoga a Fermoselle para controlar las orillas del Duero. En este pequeño municipio portugués se encuentra Parque Natural do Douro Internacional, donde se protegen las aves en peligro de extinción a nivel nacional e internacional. También, destaca su enorme presa y como no, otro mirador, denomina “El Mirador de las escaleras”. Y como sé que un gran incentivo para que visites este lugar es conquistar tu paladar, te puedo asegurar que aquí se encuentran restaurantes de calidad en los que poder degustar la gastronomía de la zona de la mejor manera posible y con unos económicos precios. Asique ahora no tienes excusa para hacer una visita.
Otro municipio que despierta gran interés es Mogadouro, presume por contar con un rico patrimonio de castillos e iglesias románicas, por lo que aunque tu visita no tenga como fin visitarlos, no podrás evitar toparte con varios y te verás obligado a detener tu camino para contemplar su belleza en detalle. A pesar de estos edificios, lo que más llama a los turistas son sus miradores. Aunque, no te voy a negar que el mayor de los reclamos como no podía ser de otra forma, es su gastronomía espectacular y como no, sus excelentes vinos y aceites.
Y ya que estamos cerca de Portugal, sería un despropósito por mi parte, no nombrar a la importante Miranda Do Douro. Este municipio, a pesar de ser un reclamo para los extranjeros, el mayor número de visitas que recibe a lo largo del año, es de los propios vecinos de zonas cercanas, como pueden ser los zamoranos, al ser un lugar cercano y con pequeños comercios de productos de calidad. Si visitas esta ciudad, no olvides comprar en uno de sus pequeños comercios el bacalao o algunas piezas de sus famosos paños de cocina. Se podría decir, que estos son los productos de recuerdo de la zona.
Dejando a un lado, las compras obligadas de la zona, Miranda destaca por contar con su propia catedral, ya que durante dos siglos fue la sede episcopal, hasta el siglo XVIII que fue trasladada a Bragança. El punto de mayor interés en su interior es visitar al Menino Jesús da Cartolinha, que se encuentra custodiado en el interior de una vitrina iluminada.
Otras visitas que te recomiendo son: La iglesia de la Santa Cruz y la de la Misericordia. Y si las iglesias no son tu fuerte, la visita a la Casa de Cultura, en la que da igual la fecha en la que la visites que siempre vas a poder disfrutar de una interesante exposición, además de poder visitar la zona en la que se encuentra, conocida como la “aduana de la ciudad”.
Una vez explicados los sitios que debes visitar en cada zona, te voy a recomendar algunas actividades que puedes desarrollar en las diferentes zonas nombradas.
Si haces un viaje de este tipo, me imagino que vas en busca de aire limpio, paz, naturaleza y mover un poco el esqueleto. Asique, aquí te traigo la actividad que reúne todos estos aspectos: SENDERISMO, y no, no me pongas excusas de que no estás preparado, de que quieres descansar, de que vas con niños, que patatín o que patatán… Esta actividad es apta para hacer con niños y no necesitas ser un deportista de elite, además te aseguro, que es la mejor forma de disfrutar el paisaje y de llegar al punto de desconexión total. Asique déjate de remolonear y echa un vistazo a las propuestas que te dejo aquí debajo.
Lo más importante a la hora de escoger una ruta es la belleza del paisaje que rodee todo el camino, así será más ameno, pero mucho mejor, si al final del camino te esperan unas vistas de película. Si es esto lo que buscas, cualquiera de las rutas de las cascadas será un acierto. Las que reciben un mayor número de excursionistas son:
Si te interesan estas rutas, puedes encontrar más información en https://www.posadadonaurraca.es/es/actividades/la-ruta-de-las-cascadas-13
En cambio, si tu objetivo no es visitar cascadas, sino simplemente disfrutar del verde paisaje y de las vistas durante el trayecto, puedes optar por el camino del Mirador de Rupitín, camino de Hierro o El Rocoso.
Ah! Y un pequeño detalle que se me olvidaba, si eres un amante del ciclismo de montaña, todas estas rutas estas acondicionadas para que puedan ser recorridas sobre ellas y disfrutar así de la ruta desde otra perspectiva.
Bueno y como ves, de nada te han servido todas esas excusas y no me puedes negar que una parte de ti está deseando perderse por estos caminos y quién sabe, quizá gracias a mi te vuelvas un fanático del senderismo.
Para concluir con las actividades terrestres, otra opción que te ofrece los Arribes del Duero si lo que buscas es una actividad más tranquila es el observatorio de aves de Aldea Dávila de la Ribera. Este, se encuentra ubicado entre el pantano de Ricobayo y las Arribes del Duero, alejado del bullicio para poder observar y fotografiar a rapaces, carroñeras, paseriformes y a la imponente Águila Real.
Y si lo que quieres es visitar los arribes desde una perspectiva diferente, cuentas con diferentes actividades entre las que poder elegir. El inconvenientes de estas, es que, al ser un espacio protegido y necesitar unos recursos especiales, es necesario contar con profesionales, por lo que para llevarlas a cabo, tendrás que contratar una excursión.
Bueno y si todavía tienes alguna duda de la belleza de los Arribes, contempla su paisaje y su fauna navegando sobre las aguas del Duero en un catamarán. El silencio que lo caracteriza, te permite oír a las aves que viven en el Parque Natural de los Arribes. Sin ninguna duda, será una experiencia única.
Otra opción similar, es la opción de un fascinante paseo en barco sobre la línea natural que separa España y Portugal. Es un viaje de una duración aproximada de dos horas y media, en las que podrás darle a tu paladar un capricho con la gastronomía típica de la región fronteriza de Tras Os Montes.
Pero si lo que buscas es lanzarte a la aventura, puedes disfrutar de este viaje de 22 kilómetros sobre una piragua. Eso sí, tras unas pequeñas explicaciones de cómo manejar el remo y abrochar los chalecos, estrás listo para navegar en zig-zag durante hora y media por los cañones y los meandros que te dejarán con la boca abierta al ser consciente de lo afortunado que eres al estar observando tal paisaje.
Bueno como ves, la visita a los Arribes del Duero, no te va a defraudar. ¿A qué esperas? Coge un calendario, elige los destinos que deseas visitar, cuales son las actividades que más te apetece probar y organiza la espada rural perfecta.
¡Oye! Y por el alojamiento no te preocupes, en La Posada Doña Urraca encontrarás el lugar perfecto para descansar de la caminata. Esta posada de cuatro estrellas cuenta con 19 habitaciones y con diferentes ambientes únicos para que mientras descansas no te pierdas las inmejorables vistas de la Villa de Fermoselle, desde su terraza exterior.
Si buscas un lugar pensado para relajarte, dejar atrás la rutina y abrir los cinco sentidos a una experiencia inolvidable, ponte en contacto con La Posada Doña Urraca, Fermoselle (Zamora).
DIRECCIÓN: C/ Requejo, 272. Arribes del Duero