Actividades
<

Las mejores rutas en bicicleta por los Arribes del Duero

¿POR CUÁL EMPIEZAS?
 

Si has llegado hasta aquí, es probable que seas un amante del ciclismo o simplemente un mero curioso que quieres conocer más acerca de los majestuosos rincones que esconden los Arribes del Duero. Sea como sea, ¡Bienvenido/a a nuestro blog! Esperamos que te guste lo que traemos esta vez.

Ya hemos hablado en otras ocasiones sobre las distintas actividades que ofrece el paisaje de Los Arribes del Duero; Sus innumerables rutas de miradores, impresionantes cascadas o señalizadas rutas de senderismo, por ejemplo. Cada cual, con un encanto especial que nos hace conectar con lo más profundo de la naturaleza. Permitiéndonos contemplar cada rincón, apreciar la belleza de su paisaje desde diferentes perspectivas, conocer a sus residentes, observar su amplia y protegida fauna en estado puro y disfrutar de su espléndida gastronomía. Y todo esto, en un único lugar: El Parque Natural de los Arribes del Duero.

Sin embargo, aunque hemos mencionado que parte de las actividades permiten el acceso de bicicletas, como cada vez son más los aficionados a este deporte, hemos querido hacer un Post especial para ellos. En él, encontrarán una amplia variedad de rutas que recorrer sobre ruedas. Así que, ven con nosotros a conocer los Arribes del Duero sobre dos ruedas.

Pero antes de sumergirnos en estas rutas espectaculares, queremos asegurarnos de que te preocupes solo por disfrutar. Por eso, nos encargamos de lo más importante: el descanso y la alimentación. Hospédate en La Posada Doña Urraca, ubicada estratégicamente en el corazón de Fermoselle, la capital de los Arribes del Duero. Aquí podrás descansar plácidamente y deleitarte con los mejores platos locales elaborados artesanalmente. ¿A que ahora te han entrado más ganas de empezar con la ruta? ¡Pues vamos allá!

Primera parada: Pinilla de Fermoselle.

Como hemos dicho, el punto de salida será La Posada Doña Urraca, ya que, gracias a su estratégica ubicación en el corazón de la capital de los Arribes del Duero (Fermoselle) ofrece un sinfín de rutas senderistas.

Equípate con una mochila, agua y algún tentempié, que si ya de por sí la naturaleza da hambre si a esto le sumamos el pedaleo…Coge tu bicicleta y dirígete a Pinilla de Fermoselle.

Este primer tramo, de aproximadamente 10 kilómetros, te servirá de calentamiento y te llevará a un encantador pueblo conocido por su imponente moral e iglesia. Ambas estructuras invitan a un maravilloso paseo por la parte izquierda del Río Duero. Si tienes tiempo, explora sus calles y visita la Fuente de Pila Blanca o la caseta de Carabineros, estructuras antiguas que aún se conservan. Destaca el gran cultivo de olivos, una especie propia del clima mediterráneo, que ha prosperado gracias al arduo trabajo de los habitantes a lo largo de las generaciones. Lo han conseguido construyendo terrazas en las laderas para nivelarlas hasta alcanzar la ribera del río.

Pinilla de Fermoselle (Derechos de imagen Wikiloc: Carmen Julián)

Con esta experiencia en mente, regresa al punto de partida, la Iglesia de Nuestra Señora Del Carrasco. Dirígete a la zona más baja y busca la señal roja y blanca, la ruta está claramente marcada. Este sendero, el "GR.14", muy popular entre los ciclistas, te sumergirá en un entorno tranquilo, rodeado de paisajes únicos y cautivadores que albergan diversas especies de aves rapaces.

Segunda parada: Formariz.

Siguiente parada: Formariz, un municipio de Villar del Buey. La distancia que hay entre Pinilla y este segundo destino, es similar al tramo anterior por lo que no te llevará mucho tiempo. En el tránsito de esta ruta, atravesarás enormes bosques de alcornoques y encinas, empinadas montañas y pequeños ríos…Todos ellos, formando un bello paisaje que podría ser el escenario propio de una película. Sin embargo, si por algo se caracteriza esta pequeña comarca son, por los restos de un antiguo palacio, el Palacio de los Cinco Bolos.

En cuanto a la gastronomía, en Formariz puedes disfrutar de platos típicos de la cocina zamorana y alistana, como el queso de Aliste, el bacalao a la tranca o el cordero. Si eres de dulces, te recomendamos que pruebes algunos productos típicos de la repostería tradicional como por ejemplo las famosas rosquillas de palo o las perrunillas. Además, de su famosa variedad de vinos bajo la Denominación de Origen Arribes elaborado por los propios habitantes locales.

Tercera parada: Bermillo de Sayago.

Ahora sí, con la barriga bien llena proseguimos con la ruta. Esta vez nos vamos a dirigir a Bermillo de Sayago, una localidad zamorana que se sitúa en el centro de Sayago, geográficamente hablando. Espero que te hayas cargado bien de energías porque este tramo es un poco más largo, pero tan poco te asustes ¡eh!, son unos 17 kilómetros de media, que variarán según tu ritmo y condición física.

Bermillo de Sayago, a pesar de ser considerada una de las villas de la Hermandad de concejos del Reino de León, durante la Edad Media, actualmente ya no es así.

Antiguo molino de Sayago (Derechos de imagen Wikiloc: jjgonzalo)

Entre sus puntos de interés se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, construida en el siglo XVI y sometida a diversas reformas a lo largo del tiempo. Las casas del pueblo, de dos plantas y construidas en piedra. Su función principal, en la primera planta se llevaban a cabo distintas actividades comerciales mientras que en la parte superior se utilizaban como vivienda. Y siguiendo por edificaciones populares no podemos olvidarnos de la antigua cárcel y juzgado que a día de hoy sirve de centro cultural. Y, por último, un lugar que comparten todos los pueblos, a pesar de sus pequeñas dimensiones es la Plaza Mayor. Un lugar icónico de la villa y sin duda, el epicentro y zona de encuentro de sus habitantes. Se encuentra coronada por el Ayuntamiento y el monumento honorífico a Federico Requejo, un político español impulsor de varias obras de carácter civil durante los siglos XIX y XX.

Cuarta parada: Fariza.

Transcurridos 45 minutos y unos 15 kilómetros, tendrás ante tus ojos la siguiente parada: Fariza. Pedalearemos por un paisaje similar, cubierto de vegetación y una amplia arboleda de encinas, alcornoques, jaras y robles autóctonos. Pasaremos por pequeños pueblos, donde con suerte habitan unos pocos ancianos, como Muga de Sayago o Zafara.

Una vez entres en el municipio de Fariza, notarás una suave ondulación del terreno característica de la penillanura sayaguesa. Aunque la altitud máxima es de solo 750 metros, la zona destaca por sus arribas, cauces profundos formados por el río Duero. Si el clima lo permite, te recomendamos explorar el municipio desde el agua, surcando el río en el famoso crucero cincelado cerca de la iglesia o el típico crucero de Palazuelo. Si prefieres optar por el terreno firme, no te pierdas la Ermita de la Virgen del Castillo, una impresionante estructura que permanece colgada sobre el cauce del Duero o los numerosos puentes, molinos y fuentes.

Iglesia parroquial de San Julián y crucero en Fariza (Derechos de imagen Wikiloc:TURISMO en ZAMORA)

Después de tanto pedalear y explorar, es probable que tengas hambre. ¿Qué te parece un bocadillo o, mejor aún, entrar a un bar del pueblo y disfrutar de una tapa típica? ¿Bacalao a la tranca, patatas con pata o carrilleras al vino tinto?

Bueno, bueno y ya descansados y con la barriga llena no hay excusas, ¡a por la bici!

Quinta parada: Fornillos de Fermoselle.

¿A dónde nos dirigimos ahora? A Fornillos de Fermoselle, también conocido como Hornillos por sus antiguos cinco hornos. Esto queda demostrado por sus yacimientos. Esta localidad se encuentra a 25 minutos de la anterior localización, unos 9 kilómetros de pedaleo por un bello paisaje lleno de vegetación.

Vista panorámica del Río Duero desde el Mirador de las Escaleras (Derechos de imagen Wikiloc: Fos Films)

En esta localidad zamorana, destacan varios monumentos llenos de historia. Entre todos ellos, nos vamos a quedar con:

  • La Iglesia de San Martín de Tours, construida desde el siglo XVII, de estilo renacentista y con un llamativo campanario que atrae todas las miradas.
  • El Potro del Reventón, una gran piedra utilizada como molde para fabricar las varas de los arados.
  • Sus casas, que llenan el lugar de un encanto especial. Aunque algunas están mejor conservadas que otras, todas evocan la imagen de antiguas familias sayaguesas que dieron vida a este mágico lugar. Imaginar cómo estas silenciosas calles estaban antes llenas de bullicio causado por el tránsito de personas y animales, el tintineo de las campanas y las alegres carcajadas es, sin duda, una sensación inexplicable y maravillosa.

En resumen, Fornillos de Fermoselle, visto desde cualquier perspectiva, es un tesoro lleno de riqueza histórica.

Destino final: Posada Doña Urraca.

 Y llegados a este punto, después de recorrer en bicicleta los pintorescos rincones que componen los Arribes del Duero, sumergimos por completo en la esencia de esta región, descubriendo no solo sus impresionantes paisajes, sino también su rica gastronomía y la hospitalidad de su gente. Ahora, toca regresar a nuestro punto de partida, La Posada Doña Urraca.

Un último tramo que nos permitirá volvernos a adentrarnos en la naturaleza salvaje de los Arribes, desde los altos miradores hasta los serpenteantes caminos junto al río, cada pedaleo nos conecta más con la pura esencia de la naturaleza.

Fermoselle y sus olivos (Derechos de imagen Wikiloc:TURISMO en ZAMORA)

Durante nuestro regreso a La Posada Doña Urraca, hemos hecho una parada obligatoria en algunos puntos de interés de Fermoselle. Y es que, a pesar de no contar con grandes dimensiones de terreno, es un encantador pueblo que destaca por sus calles empedradas, sus casas de piedra llenas de historia y sus plazas llenas de vida.

Si tuviéramos que destacar algo de ella, serían sus numerosos miradores que nos regalan vistas panorámicas espectaculares y como no, sus más de 800 bodegas oficialmente registradas, las que le conceden el título de "el pueblo de las 1.000 bodegas".

Y si tienes tiempo, te recomendamos que te acerques a “La calle Requejo”, la calle más larga y típica de Fermoselle, repleta de las tradicionales casas integradas en la roca y de algunas de las bodegas más conocidas. Si prefieres observar el paisaje desde las alturas, no te olvides de subir al mirador de Las Escaleras. Situado junto a la casa de los carabineros y desde el cual, se observan unas vistas inigualables que puedes disfrutar mientras tomas un aperitivo en su zona de merenderos.

 

En conclusión, tras recorrer en bicicleta los encantadores pueblos que conforman los Arribes del Duero y culminar la ruta en el acogedor Hotel La Posada Doña Urraca, la experiencia ha sido más que una simple travesía. Después de tantos kilómetros pedaleados, te mereces disfrutar de la combinación perfecta que te ofrece la Posada para recobrar energías. Una amplia variedad de platos caseros que recogen la tradición gastronómica de la zona, una copa de vino con la distinción de la Denominación de Origen Arribes del Duero y el merecido descanso en una de sus acogedoras y silenciosas habitaciones, lejos del bullicio de la ciudad.

Este viaje, no es una mera ruta ciclista más, sino que es una inmersión completa en la autenticidad, belleza y cultura que caracterizan al Parque Natural de Los Arribes del Duero.

Gracias por acompañarnos una vez más en nuestras aventuras por los Arribes, ¡hasta la próxima!

 

En la Posada Doña Urraca, te espera no solo un alojamiento, sino la promesa de convertir tu visita en una experiencia inolvidable.

DIRECCIÓN: C/ Requejo, 272. Arribes del Duero (Fermoselle, Zamora).

Newsletter

Inscríbete en nuestro boletín y recibirás noticias acerca del entorno, ofertas en nuestra posada y códigos de descuento para obtener el mejor precio en tu reserva.